12/10/2017
Los medios de Corea del Norte informan al pueblo sobre los asombrosos progresos del bienaventurado gobierno de Kim Jong Un, sea en la cosecha de manzanas o en las pruebas nucleares. Así que, cuando los norcoreanos quieren saber algo del mundo real recurren a las radios extranjeras que cada vez más luchan por su atención. La última que se sumó a ese esfuerzo es BBC Corea, que comenzó a transmitir a finales de septiembre, y fue inmediatamente interferida.
Como los aparatos de radio aprobados por el Gobierno están modificados para que reciban solo las ondas oficiales, el enorme mercado negroprovee radios que permiten captar hasta 10 emisoras de onda corta dirigidas a los norcoreanos. Una encuesta de la agencia federal del gobierno estadounidense que supervisa las transmisiones de Voice of America (VOA), el Broadcasting Board of Governors, halló que el 29% de los que escaparon de la dinastía Kim escuchaban radios extranjeras antes de salir.
Es imposible, sin embargo, estimar una cifra de público. Dado que la forma más habitual de pasar las noticias es de boca en boca, se presume que esa casi tercera parte de los norcoreanos podría, en realidad, ser más amplia. Por cada oyente se informan las personas con las que habla.
Según dijo a 38 North, el blog de noticias del Instituto Estados Unidos-Corea de la Universidad Johns Hopkins, "una de las grandes amenazas al sistema norcoreano y al régimen es la capacidad de comunicarse entre sí que tiene la gente, y también su interacción con los medios extranjeros".