10/05/2019
Se trata de un dispositivo que sale del vehículo policial hasta situarse a la altura del coche infractor. El mecanismo consta de un pequeño monitor a través del cual el agente da las órdenes al sospechoso y también de una cámara que permite observar a la persona que conduce el vehículo detenido. Gracias a este robot se crea una distancia de seguridad entre los agentes y los potenciales infractores y ambos se pueden comunicar por audio y por vídeo. Pero además, este dispositivo está equipado con un lector capaz de escanear un carnet de conducir y con una impresora térmica que imprime documentos como multas o citaciones. Con el robot también se despliega una banda de pinchos que se sitúa debajo de las ruedas del vehículo detenido para evitar una posible huida. Reuben Brewer está desarrollando su robot policial para el Departamento de Tecnologías Aplicadas SRI Internacional y pretende dar respuesta a los miles de ataques y altercados físicos que, en ocasiones, han acabado con la muerte de agentes